Mientras caminaba rumbo a mi casa y pensaba, escucho que me llaman, volteo y era él. Le volví a decir que podía irme sola y que no se preocupara pero el insistió en acompañarme. Y así nos fuimos caminando rumbo a mi casa, conversando, contandonos nuestras cosas con una confianza tan grande, como si nos conocieramos desde siempre.
Al día siguiente conversé con Julissa, le dije que había conversado con él y que no se sentía bien con la manera en que lo trataba pero pareció no importarle, no hizo nada al respecto y siguió comportándose de la misma manera. Estaba tan obsecionada con volverse popular que parecía utilizarlo, sólo quería tener al chico lindo a su lado.
Pasaron los días y este chico me buscaba cada vez más. Así que empezé a evitarlo, no quería tener problemas con mi amiga. Hasta que él se dio cuenta que lo evadía y un día se plantó en la puerta esperando que le diera una explicación de mi alejamiento ¿Te parece poco que el novio de mi amiga me esté buscando? y ni bien termino de hablar veo que Julissa había estado al costado mío. Me quedé helada, no sabía que decir, no quería que pensara mal pero bueno creo que ya no podíamos seguirle ocultado. Ella muy molesta me reclamó como era posible de que le hiciera eso, pero no le había hecho nada e intenté que comprendiera eso. Para mi él era el chico perfecto pero tambien era el novio de mi amiga y yo respetaba eso, jamás me metería con él así estubiera enamorada. Así que si tengo que elegir entre el chico perfecto y mi mejor amiga... la eligo a ella. Nos abrazamos muy fuerte, somos como hermanas y nos conocemos la una a la otra. Así que ¡Ni dudar! sonreimos y me sorprendió cuando me tomo de la mano y a él también. Nos pidió disculpas por su comportamiento de esos últimos días (había cambiado bastante) y por que en realidad no lo supo valorar a él, nos confesó además que no estaba enamorada y que pensaba que nosotros podíamos ser una linda pareja y ¡Adivinen qué! El día de hoy los tres somos mejores amigos y... él y yo, novios.
Se que pronto llegará alguien especial para Julissa, lo cual no es una preocupación para ella. Ella está super feliz como está y lo digo porque somos sus confidentes y testigos de todas sus locuras.
